Montaje del puente Villorita genera cambios temporales en la movilidad del sector
El segundo puente vehicular y peatonal que se construye en la Prolongación Simón Bolívar, registra un avance del 25% de obras para su instalación. En los próximos días se iniciará con el montaje de las vigas de acero que configurarán los 185 metros de longitud.
El puente Villorita corresponde al principal hito de conexión vial del Tramo II de la Prolongación, junto con el puente De los Pájaros representarán las mejoras alternativas de movilidad desde y hacia la av. Manuel Córdova Galarza, constituyéndose como las dos únicas conexiones estratégicas que descongestionarán el creciente tráfico proveniente de las provincias del norte y las parroquias noroccidentales, para conectarlas de forma rápida y ágil hacia los diferentes extremos de la ciudad de Quito.
La implantación de esta imponente estructura vial, demanda de la intervención de maquinaria especializada para el montaje y compactación por secciones de las dovelas que integran la viga de acero, que en promedio cada dovela mide entre 9 y 11 metros de largo, y se implanta a una altura de 30 metros sobre el Río Monjas. Por esta razón, se ha previsto generar un cierre vial entre el redondel de San José de Morán y el redondel de Tajamar, mientras la maquinaria, los diferentes elementos del puente, el personal técnico y de obra, deban utilizar una parte de la vía y el redondel de Tajamar.
Mientras se desarrollan los trabajos del montaje del puente, se reforzará la señalización de seguridad de obra, y seguridad vial, además de coordinar planes y acciones de movilidad para sostener la circulación vehicular de forma normal a través de la av. Eloy Alfaro en dirección a Carapungo, o a través de rutas alternas para retomar la Prolongación Simón Bolívar en el redondel de San José de Morán de manera directa hacia el Intercambiador Carapungo.
Los trabajos en mención serán ejecutados desde este sábado 11 de noviembre hasta diciembre de este año, por eso, se mantendrá una permanente coordinación y apoyo de la Agencia Metropolitana de Tránsito para el control de los giros y desvíos vehiculares, pero sobre todo para el resguardo de la movilidad peatonal.