La alternativa terapéutica de fisioterapias, en el Hogar de Vida 1, se apoya con FUNCADE
“No le pare bola, no le pare bola, no le pare bola” “Me está amortiguando, me está amortiguando”, repite sin cesar Gladys González (82 años), mientras la fisioterapista del Hogar de Vida 1 del Patronato San José y tres auxiliares de la “Fundación Capacitación de Desarrollo Ecuatoriana” – FUNCADE, colocan en sus piernas compresas de agua caliente. “No le pare bola, no le pare bola, no le pare bola” “Me está amortiguando, me está amortiguando”, continúa diciendo incansablemente Gladys, quien fuera diagnosticada con esquizofrenia.
Escenas como ésta son bastante comunes en el Hogar de Vida 1, del Patronato Municipal San José, que tiene al cuidado a 106 adultos mayores con algún problema de discapacidad física, mental o falta de lenguaje.
Según indica Byron Santamaría, coordinador de la institución un 70% utiliza silla de ruedas y un 20% algún otro tipo de herramienta ortopédica; por lo que, la fisioterapia, a través de compresas químicas, laser, electro-estimulación, gimnasia activa, entre otras, es una tarea diaria que la realiza personal calificado en fisioterapia.
Santamaría sostiene que la fisioterapia no es un ejercicio simple sino que ayudan a disminuir el dolor y al no usar medicación los efectos colaterales son nulos; por ello destaca el valor de la firma del convenio entre el Patronato, y FUNCADE “Fundación Capacitación de Desarrollo Ecuatoriano”, que apoya con auxiliares en fisioterapia.
El convenio manifiesta que las auxiliares deberán cumplir 100 horas de asistencia en fisioterapia, de lunes a miércoles de 8H00 a 16H30. Eso lo conocen Alexandra Olivo, Miriam Bungacho y Gladys González, las tres auxiliares de FUNCADE que colaboran con el Hogar de Vida 1, cuyas funciones son movilizar a los adultos mayores desde las habitaciones hasta la sala de fisioterapia, asistir al fisioterapista y, ayudar a realizar gimnasia activa (bajo supervisión).
El área de capacitación de la Fundación tiene como meta, desarrollar al máximo la capacidad de aprendizaje de sus estudiantes, fomentar relaciones personales positivas y promover la educación más allá del aula de clases prestando servicios a la comunidad en centros de atención comunitaria del Patronato, contribuyendo de esta manera al fortalecimiento de los servicios de la Unidad, así como la restitución de derechos de los grupos de atención prioritaria beneficiarios del esfuerzo de los estudiantes voluntarios.
Valeria Galarza es fisoterapista en el Hogar de vida 1 y dice la mejor paga que ella tiene es darle una vida digna y ver sonreír a un adulto mayor. Byron Santamaría complementa el criterio diciendo que aunque muchos de los usuarios parecen estar perdidos en su situación mental, sus rostros serenos es una muestra de agradecimiento.
“No venimos a ciegas sino a colaborar con lo que hemos aprendido”, dice Alexandra; mientras para Verónica dice que en el rostro de muchos adultos mayores ve a su madre y siente la satisfacción de saber que puede ayudarla con todo lo aprendido”, en tanto, que Mirian, dice “Me gusta ayudar a los más desprotegidos y por eso vengo inclusive los sábados”
Los convenios de cooperación permiten potencializar la calidad del trabajo del Hogar de Vida 1, por lo que se renovará el mismo a fin de continuar con 20 Tratamientos de fisioterapia y rehabilitación para adultos mayores: rehabilitación física y neurológica, y los tratamientos de artritis, artrosis y reumatismo que buscan mantener la independencia en la movilidad y desarrollo de las actividades de la vida diaria a través de planes personalizados, según la patología del paciente.