Vendedores de caramelos contarán con nuevos mobiliarios

Con el propósito de reordenar y mejorar la imagen urbana del Centro Histórico de la capital, el Municipio Metropolitano de Quito, a través de varias instancias municipales y con la colaboración de algunos estudios de profesionales de arquitectura y diseño, trabaja en un proyecto piloto para iniciar la elaboración de nuevos mobiliarios para los vendedores de caramelos del casco colonial.

Las instancias municipales participantes: Secretaría de Territorio Hábitat y Vivienda, Secretaría de Desarrollo Productivo y Competitividad, Administración Zona Centro Manuela Sáenz (AZMS), Quito Turismo y varios estudios profesionales de arquitectura y diseño, consensuaron con los vendedores de caramelos del Centro Histórico, en la reunión efectuada la tarde del martes 29 de octubre en Conquito.

Sandy Campaña, Administradora de la Zona Manuela Sáenz, destacó la importancia de mantener la memoria viva de la ciudad. “Los comerciantes: carameleros, poncheros, betuneros son parte del Patrimonio Histórico de la capital, por lo tanto hay que dotarles de un mobiliario funcional, con el que puedan ejercer su actividad”, manifestó.

En la reunión participaron dos vendedores del Sindicato de Carameleros Primero de Mayo del centro de Quito, para informar las necesidades y dificultades que tienen con los actuales mobiliarios.

La directora de Metropolitana de Desarrollo Urbanístico, Adriana Ávila, explicó a los profesionales de los estudios participantes que deben tomar en cuenta, los requerimientos de los comerciantes, así como las dificultades que les causa el mobiliario actual, a fin de mejorar esas situaciones y conseguir eficiencia en su labor.

El responsable de la Unidad de Espacio Público de la Zona Centro, Eduardo Maldonado, informó que los puestos actuales son de 1.50 x 1.20 y que los nuevos mobiliarios no deben superar esas medidas. Indicó además que son 90 vendedores de caramelos que se ubican en el casco histórico, pero que el mobiliario en la primera etapa será solo para 25 de ellos, como una prueba piloto de funcionamiento, luego se destinará para los demás.

Miguel Almachi y Rosa Caza, representantes del Sindicato de Carameleros Primero de Mayo, solicitaron que los mobiliarios sean de estructura metálica, que cuente con una amplia cubierta que les permita refugiarse tanto del sol como de la lluvia, que tenga un vidrio no muy pesado para la exhibición de su mercadería y para que sea fácil trasladarlo. Informó que la mayor parte de vendedores del casco colonial son adultos mayores que movilizan su puesto de trabajo cerca de tres a seis cuadras y por esa razón debe ser liviano.

Los profesionales de los Estudios de arquitectura y diseño, tomaron nota de los requerimientos, analizaron la parte humana de los vendedores y con esos datos, se podrán a trabajar para alcanzar el objetivo deseado. Una vez que el diseño esté listo será presentado para proceder con su elaboración.