Habitantes de calle de La Basílica fueron sensibilizados y se les realizó pruebas de COVID-19
Este lunes 9 de noviembre, funcionarios del Municipio de Quito realizaron una intervención con los habitantes de calle que se ubican en los alrededores de la Basílica del Voto Nacional, en el Centro Histórico de Quito.
El trabajo arrancó a las 17:00. Representantes de las Secretarías de Inclusión Social, Seguridad, Salud, Unidad Municipal Patronato San José, Cuerpo de Agentes de Control y de la Administración Zonal Manuela Sáenz se ubicaron en uno de los puntos críticos de la ciudad: La Basílica del Voto Nacional, para sensibilizar a estas personas y realizarles la prueba de COVID-19.
Gabriela Quiroga, secretaria de Inclusión Social, indicó que la labor es permanente. “Realizamos trabajos durante la pandemia, ofrecemos varios servicios como albergues, comedores, pero hay muchas personas que no aceptan acudir a ellos ni utilizarlos”. Hay personas que, por diferentes motivos, decidieron hacer de la calle su hogar, incluso aunque esto implique peligros, insalubridad, o desamparo.
Las personas con experiencia de vida en calle (PEVC), muchas veces sufren maltrato, explotación económica, abandono, exclusión social, alteraciones en su salud física y mental, por lo que es voluntario acceder a los servicios municipales.
Carola Pazmiño, coordinadora del Proyecto Atención a Habitantes de Calle del Patronato San José, explica que este abordaje con los habitantes de calle es un proceso. Al día se realizan alrededor de 80.
«La respuesta de las personas que viven en calle, muchas veces es muy positiva, acceden porque consideran que los servicios que se brindan, como acogida, alimentación, baño y algunos otros, son servicios fundamentales para ellos”.
El plan de intervenciones de prevención y sensibilización para la protección de derechos de las personas en situación de vulnerabilidad contempla este tipo de abordajes para brindarles una mejor calidad de vida con atención integral, servicios de alimentación y trabajo social, a través de la Unidad Patronato Municipal San José.
Este lunes en la noche, adicional a la invitación para que acudan al Hogar de Paz para bañarse, servirse comida caliente y descansar tranquilamente, en una cama y bajo techo, se tomaron pruebas de COVID-19.
El proceso inició con la toma de temperatura y saturación de oxígeno y luego la prueba nasofaríngea a 20 personas.
Marco Antonio es guayaquileño. Vive en la calle desde hace cinco años. Es uno de los ochenta habitantes que se ubican todas las noches en los alrededores de La Basílica del Voto Nacional.
Relata que el trabajo que realiza el Municipio de Quito es muy importante porque permite conocer cómo están de salud, “la prueba puede detectar quién está con la pandemia y así nos cuidan a nosotros que no estamos afectados. Hay que seguir cuidándose”, remarcó.
Tres personas abordadas la noche de hoy aceptaron ir al Hogar de Paz, ubicado en El Tejar. A su arribo siguieron el protocolo establecido: se bañaron y desinfectaron, compartieron con otras 22 personas una charla y una película, merendaron y fueron a dormir.
En este Hogar permanecen desde las 18:00 hasta las 07:00, luego de desayunar salen a realizar sus actividades diarias. Muchos de ellos regresan al otro día.