La chatarrería, un negocio que requiere LUAE
Teresa O. recuerda el 14 de febrero como el día del amor, y no por enamorada, sino porque en esa fecha, en el 2021, nació su amor por la chatarra. A partir de esa fecha, en un abrir y cerrar de ojos en el garaje de su casa aparecieron sillas, lámparas, microondas, adornos, ventanas y un sinfín de cosas, ¡Sí señor! había comenzado con pie derecho su emprendimiento de chatarra.
“Todo metal que creen que no sirve, a mí me sirve, no solo que ayudo a cuidar el medio ambiente sino que es mi sustento económico”, dice “La Tere” (así la conocen en su barrio), quien muestra orgullosa un ordenado negocio, pues no es la típica chatarrería donde se ven montañas de fierros viejos y oxidados, a primera vista, más bien parece una tienda de raras antigüedades.
En agosto, llegó a la chatarrería la Agencia Metropolitana de Control diciendo, “¿Me indica su LUAE?, pidió el funcionario municipal, a “La Tere” los ojos se le abrieron con asombro; de un cajón sacó una hoja emplasticada que se la extendió al agente de control, mientras le decía “Yo cumplo con la ley, saqué el RUC”, cuál sería su sorpresa, al enterarse -en ese preciso momento- que el documento que le habilita a abrir su negocio de chatarra es la Licencia Metropolitana Única para el ejercicio de Actividades Económicas, LUAE.
“A veces hay esa mala percepción por parte de la ciudadanía de que, si yo tengo un negocio en un local pequeño o en el domicilio no se debe obtener los permisos de funcionamiento, y eso no es así”, dice Marco Moya, coordinador de LUAE de la Dirección Metropolitana de Servicios Ciudadanos, quien afirma que cumplir el procedimiento para obtener la patente municipal y la licencia de funcionamiento, es sencillo.
De su lado, Henrry Reyes, director metropolitano de Servicios Ciudadanos, aclara que todo ciudadano que tenga un local comercial donde atienda al público por pequeño que este sea, está obligado a obtener la LUAE, conforme lo establece el Código Municipal que en el TÍTULO V establece claramente que, todas las personas que ejercen una actividad económica en un establecimiento deben obtener la LUAE; previo a la obtención de este permiso de funcionamiento, deberá cumplir con su la inscripción de la patente, que es el impuesto que se cancela por ejercer una actividad económica.
En el caso de esta historia, la Agencia Metropolitana de Control, verificó que el negocio de chatarra no tenía el permiso de funcionamiento, por lo que inició el proceso sancionador y recibió una multa de 4 remuneraciones básicas unificadas, que corresponden a la categoría 1 para negocios pequeños.
Moya además, hace referencia a que, requerir el permiso de funcionamiento, automáticamente se alerta al Cuerpo de Bomberos, y dependiendo de la categoría, el solicitante deberá realizar la auto declaración de Bomberos en la plataforma web, o serán ellos mismos quienes fijen la cita para hacer las inspecciones previas de seguridad, prevención de incendios, instalaciones eléctricas, etc., así, los locales por pequeños que sean cuentan con las garantías, tanto para quien atiende el local como para quienes acuden a él.