‘Yavirac’: el legado de la música nacional y latinoamericana perdura

• El ambiente en el grupo ‘Yavirac’ es amigable, respetuoso y existe admiración mutua entre cada integrante.

Quito, 23 de febrero de 2024 (Quito Informa). – El repertorio musical ecuatoriano y latinoamericano tiene en el grupo ‘Yavirac’ a uno de los más amorosos divulgadores de su rica composición.

El nombre de Yavirac proviene del antiguo nombre del ‘Panecillo’, y según investigaciones significa ‘Collado del sol o Loma del sol’; además, en algunas culturas indígenas puede tener un significado específico, relacionado con la mitología o la historia local.

Este grupo está conformado por músicos versátiles que se enfocan principalmente en la interpretación de ritmos como: pasillo, albazo, sanjuanito, pasacalle, aire típico; vals, bolero, etc.

Yavirac inició su trayectoria de la mano del Municipio del Distrito Metropolitano de Quito en 1992 (32 años), como la ‘Rondalla del Departamento de Cultura’ y fue creciendo junto a la Fundación Teatro Nacional Sucre, actualmente es un cuarteto conformado por guitarra, requinto, bajo eléctrico y tres voces.

De estos años juntos, sus integrantes recuerdan las risas y anécdotas que trae cada uno en su experiencia musical, así como la lucha diaria hasta lograr consolidar un grupo monolítico, para lograr lo que actualmente es ‘Yavirac”, una agrupación de calidad y de gran aceptación del público.

En los ensayos, no falta la broma y las risas.

Yavirac está conformado por:

Samandra Michuy: primera voz del grupo se caracteriza por su gentileza, amabilidad y respeto para con cada integrante, siempre tiene buena predisposición para cada proyecto propuesto por el grupo.

Luis Tituaña: segunda voz y bajo eléctrico, muy colaborador, amable, respetuoso, honesto, siempre dispuesto a ayudar en cada proyecto, es muy creativo y aporta con ideas al grupo.

Edwin Gutiérrez: tercera voz y guitarra; entusiasta, respetuoso y carismático, colaborador y coordinador de todas las actividades que realiza el grupo. Posee mucha empatía y se desempeña hábilmente las actividades que se le asigna.

Eduardo ‘Chocolate’ Morales: tercera voz y requinto, carismático y una biblioteca musical, es una eminencia en cuanto a música ecuatoriana y gracias a su experiencia la agrupación continúa aprendiendo repertorio y estilo.

Una de las canciones más pedidas es ‘El Aguacate’ del compositor César Guerrero, una melodía atemporal, tanto por su contenido musical como literario. Los integrantes de aspiran, a futuro, llegar con su música a la memoria colectiva de las futuras generaciones mediante la conservación de las obras y sonoridades creadas por nuestros autores y compositores ecuatorianos.

“Como artistas, intérpretes de nuestra música, el deseo es que el público que acude a nuestros conciertos disfrute del repertorio que realizamos, adentrándose en las vivencias de cada uno de los autores y compositores de las canciones que interpretamos, y así generar el sentido de pertenencia a nuestra cultura”, sostiene Samandra Michuy.