El Concejo Metropolitano presentó condolencias en la Nunciatura Apostólica ante el fallecimiento del Papa Francisco
Quito, (Quito Informa).- El Concejo Metropolitano en representación de la ciudad presentó dos acuerdos de condolencias por el sensible fallecimiento del Papa Francisco en la Nunciatura Apostólica, ubicada en la av. Orellana y 6 de Diciembre. En las resoluciones se hace un merecido reconocimiento por su legado e indica el luto por tres días en la ciudad y la colocación de las banderas a media asta.
La vicealcaldesa Fernanda Racines, el concejal Bernardo Abad y la concejala Cristina López fueron recibidos por el monseñor Andrés Carrascosa Coso quien es el Nuncio Apostólico en Ecuador desde el 22 de junio de 2017. En el lugar se tocó las trompetas como solemnidad del luto y se entregó una ofrenda floral.
La vicealcaldesa, Fernanda Racines, indicó que realiza el encargo del Concejo que a nombre la ciudad se declare el luto por 3 días frente a la pérdida del Papa Francisco y que ha sido un padre para toda la humanidad. “Rescato el papel que dio a las mujeres dentro de la iglesia católica. Auguramos y su alma descanse en paz en compañía del señor y que el espíritu santo acompañe a las personas para nombrar a su sucesor para que siga el camino de bondad, alegría y que recordemos siempre la frase: ‘fraternidad para sanar el mundo’ para que se sane el mundo, el Ecuador y nuestra ciudad”. añadió.
El concejal, Bernardo Abad, manifestó que se han traído las resoluciones en representación de la ciudad y que demuestra que Quito recuerda al Papa, que debe tener luto porque fue un referente para la ciudad, Ecuador y la humanidad. Por su parte, la concejala Cristina López indicó que con mucha tristeza dieron las condolencias a nombre de todos los quiteños en la Nunciatura y que tiene las puertas abiertas para que todos los ciudadanos puedan asistir a despedir al Papa.
El monseñor Andrés Carrascosa señaló qe : “Lo mejor que se puede hacer es escuchar lo que dijo el Papa Francisco sobre el hecho de que somos personas que pensamos diferente pero que somos hermanos. Los ecuatorianos y quiteños tenemos derecho a pensar diferente y no hacernos enemigos más bien trabajar juntos por el bien de la ciudad”, concluyó Carrascosa.