Día de los Difuntos: celebración de la vida y la muerte
Este 2 de noviembre, día de los difuntos, se celebró en el Distrito Metropolitano de Quito de diferentes maneras: recorridos guiados en criptas del Centro Histórico, visita a los cementerios, recorridos nocturnos para conocer los rituales mortuorios, entre otros.
Los 44 cementerios de Quito recibieron la visita de las personas que cumplían con el ritual de cumplir con sus seres queridos. Quienes asistieron al Cementerio de San Diego se dedicaron a limpiar las lápidas, poner arreglos florales, regar el piso con agua, barrer los pisos y orar por sus seres queridos.
Este día no solo fue dedicado a los difuntos, sino que fue un día para recordar a los seres queridos, la importancia que ellos tuvieron en nuestra vida, aunque material y físicamente no se encuentren a nuestro lado, siempre seguirán siendo parte de nuestra existencia.
Marco Tulio Beltrán, religioso franciscano, manifiesta que el 2 de noviembre se realiza la liturgia de conmemoración de los fieles difuntos, “no solamente es recordar, con gratitud, todo lo que ellos pudieron habernos dejado, sino que también, es alimentar en nosotros la esperanza de la vida resucitada, que aquí en la vida terrena no termina todo. La muerte no es la última palabra, sino que creemos en una vida plena”.
En las afueras del Cementerio de San Diego, 100 efectivos de la Policía Metropolitana realizaban operativos de control del buen uso del espacio público, circulación de los visitantes para que tengan un libre tránsito peatonal sin obstáculos, al igual que ubicar de manera adecuada, en los espacios destinados para ello, a los vendedores ambulantes.