UBA resalta la labor del veterinario en un conversatorio

Quito, 2 de noviembre, (Quito Informa). – Con el propósito de conmemorar el Día del Médico Veterinario ecuatoriano, la Unidad de Bienestar Animal realizó el conversatorio sobre el Intercambio de experiencias y retos en la práctica veterinaria que contó con la participación de profesionales de la medicina, académicos, y empresarios.

Durante el evento el presidente de la Comisión de Salud del Municipio de Quito, el concejal Andrés Campaña Remache, resaltó la labor que lleva adelante la Unidad de Bienestar Animal, amparada en el pilar fundamental que es una sola salud, “el bienestar del ser humano, de los animales y del medio ambiente”. Al resaltar que los veterinarios cumplen un papel importante, en el control no solo de los animales de compañía, para mejorar su bienestar, sino también en el control de la calidad de los animales de consumo.

En tanto Paulina Coronel, directora de Gestión del Subsistema de Salud del Municipio de Quito, enfatizó que es de vital importancia el rol del médico veterinario en la salud pública, y merece la total atención y reconocimiento. “En especial por la detección oportuna de enfermedades que pueden afectar a la seguridad alimentaria, el control de plagas y vectores. Así como, la educación a los tutores para mejorar el bienestar de los animales de compañía”.

Para la directora de la Unidad de Bienestar Animal, Karina Pisco, el papel de los veterinarios es esencial en un mundo, donde se busca el bienestar de la comunidad, de los animales y del medio ambiente, es decir trabajar por una salud integral de todos.

Destacó que ahora la labor de los veterinarios está en diversos ámbitos, la investigación, la académica, la comercialización de productos, en el control de plagas, en las inspecciones, pero sobre todo son la voz de los animales que no tienen voz.

Durante el evento se conoció el trabajo que se realiza desde los distintos ámbitos profesionales de la veterinaria, la académica, la de investigación y la de control, lo que ha permitido generar normativa para prevenir enfermedades zoonóticas, así como para erradicar y controlar enfermedades como la rabia, la fiebre aftosa y otras más. Pero sobre todo para garantizar el bienestar animal.