La importancia del mantenimiento de los túneles de Quito
• Se realizan mantenimientos diarios sin cierre vehicular y mensuales con interrupción del tránsito
• La falta de estas acciones puede provocar graves daños y afectaciones
La Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas –Epmmop- cuenta con un grupo de trabajo encargado del mantenimiento de los túneles y viaductos en Quito, que tiene como objetivo principal mantener en óptimas condiciones su funcionamiento.
Se realiza dos tipos de mantenimiento: El primero es diario y se hace en los sistemas eléctricos y electrónicos del sistema de iluminación, paneles de mensajes variables, ventilación y comunicación. Los sistemas de ventilación y comunicación permiten un control automático del encendido y apagado de los ventiladores, en base al nivel de contaminación existente en el túnel. Estos equipos están expuestos a la contaminación y tienden a degradarse.
La finalidad es realizar un mantenimiento diario para mantenerlos libres de factores contaminantes, como el hollín que se genera por la emisión de gases de los vehículos. Para realizar este tipo de trabajos no es necesario realizar el cierre al flujo vehicular.
El otro mantenimiento es más integral y principalmente se realiza en equipos de mayor magnitud que, por su ubicación, que generalmente es en las alturas de los túneles, es necesario el cierre al flujo vehicular. Este es el caso de los tableros de control del circuito cerrado de televisión, las cámaras, los ventiladores, entre otros.
Para realizar este tipo de trabajo se realiza una programación que se comunica a la ciudadanía con anticipación. Generalmente los cierres se llevan a cabo de 22:00 a 05:00 para incidir lo menos posible en la movilidad vehicular.
Durante la pandemia, cuando la ciudad estaba en semáforo rojo, se suspendieron estos trabajos, sin embargo, gracias a los mantenimientos preventivos realizados con anterioridad los equipos se conservaron en buenas condiciones hasta el 15 de junio que se reiniciaron las labores.
Al momento existen cuatro grupos de trabajo con un 25% del personal operativo, para cumplir con las restricciones emitidas por el COE, los cuales trabajan en dos turnos rotativos: de 06:00 a 13:00 y de 13:00 a 20:00.
Los ventiladores en los túneles no siempre están encendidos, a partir de las 21:00 comienzan a apagarse porque hay menos circulación vehicular y por lo tanto menos contaminación. Luego comienzan a encenderse paulatinamente a partir de las 04:00 aproximadamente.
El mantenimiento es importante pues en caso de no ejecutarse, los equipos podrían estropearse y esto a la vez provocaría un elevado índice de contaminación.
Dentro de las acciones de mantenimiento también está la limpieza general de la vía, las paredes y la señalización. El túnel más largo es el de San Juan con 700m, luego San Roque con 455m y San Diego con 150m, incluida su ampliación.
Los tres túneles tienen 42 años de funcionamiento desde su inauguración en 1978. Además, se e realizan trabajos de mantenimiento en el viaducto de la 24 de Mayo, en el paso deprimido De Las Bañistas y en el túnel Oswaldo Guayasamín.
